Todos los animales fueron salvajes antes de ser domesticados. La diferencia es que existen especies del reino animal que no pueden ser adiestradas, ya que su hábitat y temperamento no lo permiten. A continuación toda la información sobre los animales domésticos y salvajes.
Comenzaremos con los animales domésticos, claramente son los animales que viven entre nosotros. Entre los animales domésticos encontramos dos clasificaciones, estas son: los animales de compañía y los animales de granja. Pueden ser especies pequeñas o grandes, pero a diferencia de los animales salvajes, estos pueden ser domesticados por el hombre y vivir cerca de él.
Cuando nos referimos a los animales domésticos de compañía, estamos hablando de nuestras mascotas, es decir: perro, gato, hámster, etc. Estos animalitos son un miembro más de nuestra familia. Tanto el perro como el gato también cumplen funciones como animales de granja, ya que el gato es un cazador de roedores y el perro un excelente guardián; es decir que cumplen funciones útiles como el resto de los animales de granja que fueron domesticados para cumplir diversas funciones. Algunos ejemplos son: el caballo utilizado para el transporte, la vaca tiene una función alimenticia al igual que la gallina y la oveja que nos brinda el abrigo.
Entonces tanto los animales domésticos de granja como los de compañía necesitan ser protegidos y alimentados por el hombre. En cambio, los animales salvajes cazan su propio alimento.
Desde los orígenes todos los animales fueron salvajes. Pero a diferencia de los gatos, caballos o perros, los animales salvajes no pueden ser adiestrados por el ser humano y no pueden adaptarse a las zonas en las que este habita. Cuando nos referimos a los animales salvajes puede que los primeros que se nos vengan a la mente sean: leones, osos, serpientes y tigres; pero debemos tener en cuenta que no son todas las especies salvajes peligrosas, las denominamos “salvajes” porque deben vivir y sobrevivir en la naturaleza por medios propios.